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jueves, 24 de octubre de 2013

LA SALIDA DE LA CRISIS


Hace algo más de un año, recibí, por medio del correo electrónico, una presentación que auguraba la salida de la crisis. La fecha no la podía vaticinar el autor del documento, pero sí la motivación final para tan feliz desenlace: cuando a los banqueros les dé la gana.

Parece que ya se ha saciado el ansia de la banca de acumular, o al menos eso es lo que nos dice el señor Rajoy. Porque don Mariano, con esas medias palabras a las que nos tiene acostumbrados, y vía pantalla de plasma, nos acaba de anunciar que la crisis ha terminado. ¡Qué contentos nos hemos puesto todos los españolitos de a pié!.

Ya se acabaron las estrecheces, las noches dando vueltas en la cama para ver cómo llenar la olla, las visitas a los bancos a pedir el aplazamiento del pago de la hipoteca… Ya podemos pedir préstamos para comprar un pisito, para abrir un negocio o para lo que queramos. ¡Aleluya!. ¡Menos mal que teníamos a don Mariano!, y a don Cristóbal y al del guindo, y a la ratita feliz, y a la Cospe… ¡Gloria a los caballeros y caballeras de la tabla redonda que forman nuestro gobierno!.

Nada más que una pega a la buena nueva anunciada por Don Mariano, via plasmática: a ver cuando empezamos a ver de verdad esos brotes verdes, porque mi vecino sigue parado y en mi pueblo todavía hay cincuenta familias que tienen que recurrir a la solidaridad ciudadana para llenar la olla.

Unas preguntillas, don Mariano: ¿A pesar de tener más de 6 millones de parados hemos salido de la crisis? ¡No me lo puedo ni de creer!. ¿Y que más de 8.000 estudiantes de la Universidad Autónoma de Madrid (también en el resto de universidades españolas) hayan tenido que abandonar sus estudios es otro síntoma de los brotes verdes?. La bajada real de pensiones y por tanto la pérdida de poder adquisitivo de nuestros pensionistas, ¿no es un problema para que vd. vea brotes verdes a troche y moche?.

Verá Vd. don Mariano, me gustaría que le hiciera vd. una pregunta a su ministra doña Fátima, sí, la de los milagros de la Virgen, ¿cuál es el nombre “tesnico” de la emigración ahora?. Porque como ahora los que se van al extranjero a ganarle los dineritos a la Merkel y compañía son trabajadores supercualificados, formados en nuestras universidades públicas con lo que se recauda de los impuestos que pagamos los ciudadanos, a lo mejor es por eso por lo que tiene otra denominación lo que antes era emigración.

Más brotes verdes: Verá don Mariano, me dice el INE, que por cierto es un organismo oficial dependiente de su amigo don Cristóbal, que tenemos el mayor endeudamiento exterior de la historia de nuestro páis, y eso lo han logrado ustedes, no le eche la culpa al ZP ¿eh?. Según estos datos, estamos rozando el 100% del PIB, es decir que lo que vayamos produciendo es para pagar las trampas en las que su gobierno, el suyo don Mariano, nos está metiendo.


Bueno de la bajada de salarios a los currantes, de la reducción de sanitarios, profesores, policía, bomberos, etc. ni hablamos. Ni tampoco le voy a decir nada de la subida de la luz, de la gasolina, del agua de beber (tenemos el vicio de beber para seguir viviendo, ¡qué le vamos a hacer!). Por cierto don Mariano, ¡vaya el ridículo que hemos hecho en el tribunal de Estrasburgo y el que nos espera con lo del Peñón!.

Me gustaria Don Mariano, usted que dicen que es un personaje inteligente y de mente preclara, que me definiera la palabra crisis, que me aclarara los términos de este concepto. La verdad es que últimamente no me entero, porque yo veo una cosa y usted y sus ministros dicen lo contrario. Por favor, no parafrasée a su caudillo favorito: ¡vea usted más la televisión que hay que ver y lea más los periódicos que hay que leer, y deje de mirar en la calle!.

Me dá la impresión, don Mariano, de que le ha entrado el famoso Síndrome de la Moncloa, o a lo mejor es que usted no se dá cuenta de que los brotes verdes están envenenados.

 Nino Granero