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viernes, 20 de junio de 2014

¿INCÓGNITA?


El Rey Juan Calos I abdicó, la Roja la echaron del mundial y entró Felipe VI diciendo que en España cabemos todos. Que ocurra esto en pocos días, no está mal. La historia dará cuenta de ello.

Los entendidos en las distintas políticas a las que hago mención, juzgan que el rey Juan Carlos I fue un buen rey y que, aunque en los últimos tiempos de su reinado cometió errores de bulto, no ha dejado de ser un buen rey y un buen referente para los españoles; que la Roja, aunque la han echado del mundial, es la mejor, con creces, en los resultados que hemos tenido en toda la historia del fútbol; Y que Felipe VI, que no el Hermoso, es el mejor rey preparado que reino haya tenido España, es constatable. Entonces… ¿de qué quejarnos los vasallos de este reino si somos los más afortunados de todos los países del globo terráqueo? Lo tenemos todo y no lo vemos. Por tener, tenemos hasta miserias para repartir a la globalización. Patente registrada, sobre todo en infantil. Cual cortijo fuera esta España de panderetas cuyo “señorito” se jubilara y se fuera al parque a echarles arbejones a las palomas y lo dejara en herencia a su hijo, es el trato establecido porque todo lo demás, no cumpliría con la norma.

Dicen que ha dicho el nuevo Felipe, con palabras de Cervantes que “no es un hombre más que si no hace más que otros”. No sé si es verdad que haya recurrido a Cervantes porque ni oí, ni escuché su discurso, solo a través de algún medio de comunicación habré leído lo referenciado.  Loable es que haya recurrido a nuestro Cervantes si así ha sido, puesto que nos tenemos que tragar este sapo, me hubiera gustado que hubiera introducido en su discurso el soneto de Don Belianis de Gracia a Don Quijote de la Mancha que dice:

“Rompí, corté, y dije y hice
Más que en el orbe caballero andante;
Fui diestro, fui valiente, fui arrogante;
Mil agravios vengué, cien mil deshice.
Hazaña di a la Fama que eternice;
Fui comedido y regalado amante;
Fue enano para mí todo gigante
Y al duelo en cualquier punto satisface.
Tuve a mis pies postrada Fortuna,
Y trajo del copete mi cordura
A la calva Ocasión al estricote.
Más, aunque sobre el cuerno de la luna
Siempre se vio encumbrada mi cordura,
Tus proezas envidio, ¡oh gran Quijote!”

Así habría dado un aviso contundente de su compromiso con sus “vasallos” a la corte que le rodea, de que todo no vale. Porque eso de que el rey  reina pero no gobierna es verdadero y conviene que así sea por aquello de que su legitimidad no le viene del sufragio universal, sino  de “la herencia” recibida, pero no olvidemos que poder, poder tiene mucho, no por ser el Jefe del Estado, que sí,  sino por aquello de ser Capitán General de los Ejércitos de las Españas, por eso de las autonomías.

Siendo Capitán General de los Ejércitos, su jefe superior inmediato es el Ministro de Defensa, que podría cesarlo en cualquier momento por causa justificada, o por capricho, o por no caerle bien al Ministro de turno, digo yo, ¿no?, pero seguiría siendo Rey y Jefe de Estado, eso sí, ya sin poder alguno.

Quizá no sea el momento oportuno o… tal vez si, plantear el dilema de Monarquía o República.

Está claro que mientras la Monarquía actual nos ha sido impuesta y este Rey nos llega por herencia, la “casta” entiende que tenemos que continuar asumiendo esta imposición, ignorando las voces que decimos lo contrario y que se debería someter al sufragio universal para legitimarla o repelerla, optando por la República.

Mil veces, a lo largo de estos tiempos, se nos asegura que estamos en una Democracia consolidada y madura. Si tan segura está la “casta” de que es así, ¿por qué no despejar este dilema? ¿Por qué no consultar a un pueblo consolidado y maduro? Y pondría de nuevo la palabra de nuestro Cervantes:

“Busco en la muerte la vida,
Salud en la enfermedad,
En la prisión libertad,
En lo cerrado salida,
Y en el traidor lealtad.
Pero mi suerte, de quien
Jamás espero algún bien,
Con el cielo ha estatuido
Que, pues lo imposible pido,
Lo posible aun no me den.”

Certezas y coincidencias se dan de la mano en la trayectoria del Rey Juan Carlos I y la Roja, casualidades de éxitos y fracasos o errores. Imposición y herencia: Felipe VI.

Certezas, coincidencias, casualidades, imposición, herencia,  ¿incógnita?


Simón Candón 20/06/2014

miércoles, 18 de junio de 2014

EL GRAN INDULTADOR


Nos ha salido rana el niño progre de la derecha. Desde que lo colocaron de Ministro de Justicia, don Alberto no deja de darnos disgustos. Y mira que le habíamos dado margen de confianza y de credibilidad. Era, antes de ser ministro, el político que más esperanzas y confianza generaba entre los votantes conservadores. Algunos, que nunca hemos votado la opción de la derecha, de todas formas decíamos como el refrán: “Aunque la mona se vista de seda…”.

Esa imagen, muy bien cuidada por cierto, de niño aplicado, de chico moderno y liberal, a pesar de la gomina, aunque a nadie se le escapaba su cercanía a conductas y doctrinas religiosas conservadoras, muy conservadoras, inspiradas en las enseñanzas de un santo proclamado, se sospecha, a base de dinerillo, hicieron albergar falsas esperanzas de modernización de la derecha.

La gestión de don Alberto al frente del Ayuntamiento de Madrid se puede resumir en una deuda mil millonaria (no heredada, ¡ojo!) de la capital, el fracaso dos veces consecutivas para obtener la celebración de los juegos olímpicos, lo que costó varios milloncejos a los españoles (que no a los madrileños), y algún que otro episodio más que debieron valer como “meritos” para situarlo en la carrera hacia un ministerio.

Ya instalado en el Ministerio comenzó a promocionar leyes “progres” de acuerdo con su verdadera ideología, que en nada tiene que ver con la imagen que muchos medios de comunicación se encargaron de propagar de Gallardón. Leyes tales como la de tasas que deja indefensa a la gran mayoría de los ciudadanos, la Ley del aborto (super recortado) que hace retroceder dos décadas al menos los derechos conseguidos por las mujeres y otras actuaciones “dignas de mención”, nos están dando la verdadera dimensión de este personaje: un embaucador que con sus movimientos de “trailero” (en términos políticos) ha conseguido engañar a mucha gente que, cautamente, confió en la derecha para depositar la papeleta de voto en las últimas elecciones generales.

Nos queda, por no alargar mucho el tema, una cuestión en la que también destaca la labor de don Alberto Ruiz Gallardón: su faceta como indultador nato. Y es que pare eso hay que valer, tener una cualidad cuasi genética para el indulto. Sobre todo para determinados indultos. No es cuestión de pormenorizar y hacer memoria de su gran actividad en el campo indultatorio (¡vale que sea el palabro!). Los indultos como consecuencia de sentencias relacionadas con Mallorca, con Castellón, conductores temerarios que producen muerte a personas inocentes, etc., forman parte de la hoja de méritos de este ministro. Es lo que podríamos denominar un indultador a troche y moche, sobre todo con sus amigos.

Por contra se niega de forma contumaz a conceder el indulto, propiamente a tramitar el expediente de indulto, a otros con sentencias cuyos fondos tienen un tufillo marcadamente político. Sobran los ejemplos.

Y como colofón a estas conductas indulgentes del Sr. Gallardón un caso que ha levantado ampollas y que la prensa pesebrera se ha preocupado por acallar con presteza: el indulto a un guardia civil (sus compañeros, la inmensa mayoría muy honrados, estarán abochornados) que al parecer tiene debilidades por la dirección cinematrográfica y se le ocurrió hacer sus pinitos dando muestras de su sentido del “humor”, ante un acoso sexual a una chica. Por cierto que el guardia civil indultado es hijo de un concejal del PP. ¡Claro que a lo mejor es una simple coincidencia, no queremos ser malpensados!.

El último episodio en el que se ve envuelto el nombre del Sr. Ruiz Gallardón es la fuga de su hijo tras un accidente de tráfico. Según dicen las malas lenguas (se publica en la prensa), parece que iba con alguna copita de más y el chico prefirió no esperar ante la amenaza del test de alcoholemia. Parece que la afición a las copitas es común entre los políticos de la derecha hispana.

No se podía esperar otra cosa tras el lance protagonizado por la Sra. Aguirre (doña Espe).


Nino Granadero

sábado, 14 de junio de 2014

EL PIB ESTA QUE PITRA


Los duendecillos andan sueltos. A don Cristóbal, que según dicen es el Ministro de Hacienda del Gobierno del Sr. Rajoy, ese que nos gobierna a la vez que nos machaca en representación de la Sra. Merkel, le han debido jugar una mala pasada hurgándole en el poco cerebro que parece que le queda sano. No nos cuadra que un señor tan serio y con una ética (?) tan estricta quiera meter nada más y nada menos que tres conceptos con tan mal cartel moral en el PIB, a saber: Prostitución, drogas y contrabando.

Verá don Cristóbal, estoy tentado de llamarle cariñosamente Critobita pero como no tengo tanta confianza, seguiré haciéndolo de don y por su nombre completo, no es que no se mueva dinero en el sector de la prostitución o en el trapicheo de la droga (al por menor y al mayor) o en el contrabando de todo lo que se agencia. Se mueve dinero y mucho. Distinto es quién se beneficia más de las plus valías; como siempre, los que menos doblan el espinazo, pero eso es algo a lo que estamos acostumbrados.

Don Cristóbal, si quiere Vd. colocar los dinerillos que se mueven, y que se embolsican unos cuantos como beneficios y contabilizarlos como producción, está Vd. en su derecho. No somos tan timoratos ni de una moral tan estrecha. Lo que ocurre es que eso llevaría las contrapartidas correspondientes. A saber: IRPF, pago de impuestos de sociedades mercantiles, altas en Seguridad Social, IVA al elaborar las facturas, etc.

Y nos parece muy bien que paguemos todos. Si una señora o un caballero, que de todo hay, trabaja como un buen profesional dando placer o aliviando necesidades a otros, debe “retratarse” como los que tenemos una nómina. Y lógicamente tener derechos a los beneficios que conlleva su aportación: atenciones sanitarias y sociales, aunque de éstas nos ha dejado el Gobierno al que Vd. pertenece, poquitas.

Y ya puestos, le hacemos una sugerencia: ¿por qué no mete Vd. también en la elaboración del PIB los dinerillos que sus amigos tienen en Suiza y en otros paraísos fiscales?. Tampoco estaría mal incluir los dineros empleados en la Gurtel, lo de los ERES, lo que se ha perdido en la Cataluña de los puyoles y los mas, lo que han trincado unos cuantos en Valencia, en Mallorca, en Castellón, en Galicia… Y esos sobrecillos que se rumorea que se repartían en la calle Génova, ¿los va a meter también en el PIB?.

Si consigue que se pague por todo, con los ingresos que tenga el Estado, seguro que puede liquidar la deuda y hasta crear unos cuantos miles de puestos de trabajo. Además que no estaría nada mal que pagara todo hijo de vecino y no los de siempre: los que estamos trincados por una nómina. En ese caso, no nos dolerían prendas en decir que Vd., don Cristóbal, es un tío de los pies a la cabeza. Lo que está transparente es el pensamiento de sus amigos neoliberales compatriotas y europeos: ¡poderoso caballero!.
Nino Granadero


miércoles, 11 de junio de 2014

¿PODREMOS?


No está claro si podremos fiarnos de PODEMOS. Y lamento contradecir, o al menos mantener una posición de duda, a pesar de haber depositado todas, o casi todas, mis esperanzas de que la política en este país se pueda regenerar con la aportación de la oferta electoral encabezada por Pablo Iglesias.

Me produjo asombro, y sonrojo, ver y escuchar hace tan sólo dos días un vídeo del portavoz, imagen, cabecera, representante o como queramos llamar de PODEMOS, Pablo Iglesias. Un nombre que me trae recuerdos de otro Pablo Iglesias, del que tan sólo su memoria produce el respeto de cualquier demócrata progresista.

El vídeo en cuestión trataba, creo recordar que hasta en cuatro ocasiones, de la consideración que para Pablo Iglesias, el de PODEMOS, tenía la “lucha armada del pueblo vasco”. Me produjo repulsa la postura de vasallaje del Sr. Iglesias. Habría que puntualizar algunas cosas a la cara visible de PODEMOS.

Vamos a ello. Mire Vd. don Pablo, los asesinos son asesinos. No le dé usted más vueltas: el que mata es un criminal y como tal debe ser tratado y pagar por sus crímenes. No vale que se diga que la lucha contra el franquismo no admitía otros métodos. Hubo una multitud de antifranquistas que lucharon, y mucho, contra el régimen del pequeño (de tamaño que no de mala leche) general gallego. El que mata a un hombre es un asesino y punto. Y también estoy plenamente de acuerdo con todos los que exigen la responsabilidad de los crímenes durante la época franquista. Los criminales son asesinos, sin colores ni justificación que valga. ¡Punto!.

No obstante me gustaría que me aclarara algunas cosillas en relación a la banda mafiosa cuyo símbolo, curiosamente, es una serpiente, Sr. Iglesias. Le agradecería que me enumerara los franquistas a los que “ajustició” esta banda de asesinos. ¿Los militares, policías y guardias civiles que fueron asesinados con un tiro en la nuca (por la espalda) por esos héroes gudaris haciendo derroche de valentía, eran también franquistas o eran currantes que se buscaban las habichuelas como mejor podían?. ¿Los niños, mujeres y ancianos que sucumbieron como consecuencia de los coches bombas etarras también eran franquistas?.

Ya en plena democracia, es decir, hace tan sólo cinco o seis años, o quizás algo más, ¿qué razones encuentra usted para que fueran asesinados militantes y dirigentes de partidos con larga tradición antifranquista? ¿Y matar a sangre fría en sus despachos a profesores universitarios? En este caso es que se había atrevido a criticar a ETA y claro, en un ejercicio de democracia sin parangón, los pistoleros etarras, cargados de razones y demostrando su gran intelecto, eliminaron al insurrecto. ¿Me puede usted decir, don Pablo Iglesias, que razones argumentan sus defendidos etarras para colocar bombas en sedes de partidos democráticos?. ¿Qué justificación encuentra usted, Sr. Iglesias, para que ETA asesine a la mujer de un concejal, elegido democráticamente, mientras paseaba con su marido?.

Otra actuación de esos gudaris a los que usted entiende: ¿me puede explicar por qué se asesina a sangre fría a un médico mientras pasa consulta a sus enfermos?. Esta vez fue en Sevilla y la posterior actuación deja fuera de toda duda la enorme valentía demostrada por estos luchadores euskaldunas: cuando fue detenido por un simple policía nacional que le encañonó con su arma reglamentaria, el etarra, en lugar de enfrentarse cara a cara  como se espera de un valiente, tiró su pistola con la que tan sólo media hora antes había realizado el heroísmo de dar un tiro en la nuca a un médico desarmado y se meó (literalmente); se supone que la meada fue heroica.

Podría seguir, créame tengo cuerda para cuatro folios más, pero con esto hay bastante. Espero sus razonadas y sabias respuestas. Mire vd. Sr. Iglesias si lo que pretendía usted era reclutar votos de Bildu y otros sujetos de género semejante, lo puedo entender aunque no lo comparta sino todo lo contrario, pero si se trata de un ejercicio de sinceridad consecuencia de una larga reflexión, creo que está usted de más en el panorama español y que ha conseguido engañar a muchos españoles confiados.

Por cierto, que ya somos unos cuantos los que vamos a reflexionar sobre a quién votar en las próximas elecciones. ¿Me ha entendido?. Espero su contestación.      

Nino Granadero