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miércoles, 27 de febrero de 2013

CIRCO BAR-SENNAS

A Don Mariano le crecen los enanos. Es terrible como uno tras otro se le van acumulando los fracasos, las pifias y las corruptelas (supuestas, eso sí).

Ahora, bueno desde hace unos meses, resulta que le quita protagonismo a todo un Sr. Presidente del Gobierno, una figurilla tan gris como un contable. Porque a fin de cuentas el Sr. Bárcenas no es nada más que un contable gris donde los haya. Aunque por lo que él mismo ha dicho a un notario haya conseguido acumular nada más que 38 millones de euros. A lo mejor el juez le pide las explicaciones oportunas de cómo se puede acuñar esa fortuna con un sueldo, parece que digno, bastante digno, pero que no deja de ser un sueldo.

Parece que no queda claro en calidad de qué estaba el Sr. Bárcenas en el PP. Si era un empleado, si era un despedido, si un gerente, un contable, si un repartidor de sobres, si un acumulador de millones en una cuenta suiza, si un recaudador de donaciones privadas al PP, … Vaya vd. a saber que supuestas funciones ejercía este sujeto.

Hasta ahora las afirmaciones, desmentidos, correcciones y todo lo que a vdes. se les ocurra de cambios de posturas, son constantes en el PP. Ayer resultaba que la portavoz, la Sra. Cospedal, decía que al supercontable le habían hecho un “finiquito diferido o simulado” (sic) y había seguido el partido pagando la seguridad social a pesar de que no continuaba en la nómina del PP. Esto es ilegal.

No hay que olvidar que la Sra. Cospedal es abogada del estado y el Sr. Rajoy registrador de la propiedad, es decir, que ambos son peritos en leyes.

Pero vayamos por parte. ¿Nadie en el PP conocía la normativa de cotizaciones de la seguridad social? ¿No decía la Sra. Cospedal que el gabinete jurídico del PP, avaló el despido del Sr. Bárcenas por medio de ese finiquito diferido o simulado? ¿No sabían la Sra. Cospedal y el Sr. Rajoy que la simulación de contrato es un delito?.

Ahora resulta que el Sr. Bárcenas ha sido despedido con fecha 31 de enero de 2.013, es decir con fecha posterior a la comparecencia de la Sra. Cospedal y al debate sobre el estado de la nación. Y además el ex contable del PP ha formulado denuncia ante los juzgados de lo social por despido improcedente. Según últimas noticias, ha acudido también a la oficina del INEM para apuntarse al paro y poder cobrar los 420 eurillos mensuales y poder llegar a fin de mes. Por supuesto que serán los tribunales los que se deben pronunciar sobre la procedencia o no procedencia de este despido. Se dice que ha sido indemnizado con 45 días por año de servicio como estaba contemplado antes de la reforma (salvaje) laboral del gobierno Rajoy. ¿Alguien duda todavía de la transparencia en el comportamiento de los políticos peperos?. A lo mejor es que les remuerde la conciencia por la reforma laboral.

Veanos lo que nos dice el RAE en relación con los términos empleados por la Sra. Cospedal. Diferir:(Del lat. differre).1. tr. Aplazar la ejecución de un acto. Simular.(Del lat. simulāre).1. tr. Representar algo, fingiendo o imitando lo que no es. Blanco y en botella. Si nos atenemos a las definciones de los términos empleados por la portavoz del PP, en este caso se ha pretendido engañar, siempre supuestamente. Insistimos en la calidad de peritos en leyes de la Sra. Cospedal y del Sr. Rajoy.

Llegados a este punto cabe una pregunta sobre la que puede planear la sombra de la duda: ¿cómo han aprobado las oposiciones la Sra. Cospedal y el Sr. Rajoy?. No planteamos en ningún momento que se haya forzado el procedimiento opositor, pero si nos planteamos la incapacidad, la falta de conocimientos de ambos y en que han podido tener mucha, pero muchísima suerte. Es posible que les haya tocado a ambos los únicos temas que se sabían, a lo mejor aprendidos, cual vulgares cotorros, de memoria, sin entender el contenido. No cabe otra explicación.

Pues estos dos sujetos son los que presiden nada más y nada menos que el Gobierno de la Nación y el Gobierno de Castilla La Mancha. ¿Se entiende por qué funcionan como funcionan estos ejecutivos?.

Nuestra opinión es clara y contundente, además al Sr. Bárcenas deberían acompañar en la cola del paro otros muchos. No es necesario dar nombres, sí, esos que vdes. están pensando.

Por cierto, ¿el debate sobre el estado de la nación?, “del gobierno hablaremos otro día” porque hoy tocaba hablar de payasos que para eso estamos en el circo.

Nino Granadero

domingo, 17 de febrero de 2013

PATRAÑAS. FALSO.

¿Tercera Guerra Mundial? Que vaaa. Pero… ¿como osas de decir que estamos en la tercera guerra mundial si mundialmente no hay nada reconocido como tal? ¿Qué hay guerras en distintos países del mundo? Si. Es verdad. Pero… esto siempre ha ocurrido, ocurre y seguro que ocurrirá en el futuro. Es cosa de hombre. Nunca habrá descanso en estos menesteres, pero… de esto a decir que estamos en la tercera guerra mundial, va un trecho. De la segunda, se habla todavía. Las naciones y los locos, no se por qué regla, siempre quieren hacerse con lo ajeno, dominar y ser obedecidos. Y ese es el problema. Y el problema siempre han querido resolverlo estos países y estos tipos de “locos” teniendo bajo su “yugo” a los demás.

Y estamos en las mismas que hace unas decenas de años, pero con otras connotaciones, que al fin y al cabo, nos han llevado al desastre y a la ruina en la que estamos hoy.

Hace, como decía anteriormente, unas decenas de años, un país eligió democráticamente a un “loco” que prometía este mundo y el otro, y el pueblo se lo creyó. Este “loco”, comenzó a hacer todo lo contrario a lo que había prometido, y decía que lo hacía por responsabilidad con la patria y porque no había más remedio que hacerlo, y en ese afán, provocó y desencadenó la segunda guerra mundial.

Y… no hemos escarmentado. Campos devastados. Miserias. Ruinas. Injusticias. Robos. Pillajes.

Hoy, en estos tiempos que corren, hay una consigna en nuestro país que nos repiten machaconamente y a cada instante: “tenemos lo que nos merecemos”. A esto, siempre, siempre contesto lo mismo: Yo no tengo lo que merezco. No señor. Yo no me merezco lo que me está pasando. Yo no me merezco la clase dirigente que tengo. Yo no me merezco la clase política que tengo. Yo no me merezco el Jefe de Estado que tengo. Yo no me merezco que me mientan. Yo no me merezco que me engañen. Yo no me merezco que me roben. Yo no me merezco que me ultrajen. Yo no me merezco que me hayan quitado de un plumazo todo lo conseguido por mis antepasados y por mi mismo en el terreno laboral, social y de bienestar. Yo no me merezco que me maltraten. No me lo merezco. Que no. Que no. Que no me lo merezco. Que yo no he hecho nada contrario a mis obligaciones de ciudadano para que me paguen con la moneda con la que me están pagando. Que no. Que no. Que me niego a consentir ese reconocimiento y a aceptar ese eslogan de que tenemos lo que nos merecemos. Que no. Lo que si me merezco es tener buenos y honestos dirigentes, excelentes políticos. Que no me mientas.

Los que acompañan al “loco”, para justificarlo y justificarse en la mala gobernanza y acrecentar su poder y sus privilegios, nos echan encima toda la carga de lo que está pasando y nos culpabilizan diciéndonos, que somos malos ciudadanos porque “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”. Qué por encima, ni por encima, ni niño muerto, ¡hombre!, los que han vivido por encima de sus posibilidades han sido ellos que se lo han llevado “calentito”, a espuertas, a escondidas y a otros países para que nadie se entere y tengan garantizadas y aseguradas “sus posibilidades”.

Este “loco”, también ha sido elegido democráticamente, como el “loco” que provocó y desencadenó la segunda guerra mundial. Exactamente igual. Ni un pero que decir en cuanto a su elección, pero toda la carga en cuanto a su comportamiento en sus acciones y sus decisiones.

Repito, yo no me merezco tener un tipo de esta calaña, que me quita lo que me quita, que me roba lo que me roba, que miente como me miente, que me engaña como me engaña, que me trata como a un tonto y a un guiñapo con el único interés (quiero ser benevolente) de satisfacer su ego de mandar y tenerme bajo su yugo(con flechas incluidas), joderme la vida y meterme en la tercera guerra mundial, eso si, sin tiros, pero con más muertos que sus muertos.

Tampoco me merezco tener un Jefe de Estado que consiente todo lo que está pasando, no pone pie en pared y pide perdón por haber ido a matar Elefantes y lo achaca a, como dice la canción: “todo fue un error ohohoooo”.

¿Tercera guerra mundial? Qué vaaa. Patrañas. Todo es falso.

Simón Candón 17-02-2013

lunes, 11 de febrero de 2013

CAJA A o CAJA B

Como diría nuestro amigo Manolo, “a mi me la repampimfla que sea A ó B”. Lo que si nos preocupa es que se pague en negro a personas públicas y que se financien los partidos con dinero de los ciudadanos. Y si es así, por lo menos que se aclaren las cosas. Pero vayamos por parte.

De entrada y siguiendo con la costumbre, mientras no se demuestre lo contrario, aquí todo el mundo es inocente. Es decir, mientras no haya una sentencia que diga expresamente que ha habido sobres con dinero negro y que desde el Sr. Presidente hasta el ordenanza lo han trincado, hay que decir que no hay ningún culpable. Cuando por sentencia judicial firme se diga, si se dice, que se ha producido un delito, los culpables serán los que digan los tribunales.

Pero, evidentemente, haciendo esta salvedad por imperativo legal, todos tenemos derecho a expresar libremente nuestra opinión, por mucho que le pese a Don Mariano y a sus colegas. Y así vamos a hacerlo. Por supuesto que respetando la presunción de inocencia. Lo que ocurre es que las evidencias nos invitan a opinar.

Lo importante no es que el dinero negro se haya cobrado, si se ha cobrado, en sobres y por personas que desempeñan un cargo público, con lo cual, si se ha producido el hecho se ha producido además un fraude fiscal. Si se cobra en negro no se paga IRPF ni los impuestos que procedan, con lo cual se estaría cometiendo un fraude contra la hacienda pública, y si, como decía el popular slogan de antaño: Hacienda somos todos, todos sufrimos el fraude; se estaría metiendo la mano en el bolsillo de los ciudadanos. Se recauda menos, con lo que hay menos recursos para gastar en todas las cosas que se hacen en beneficio de la ciudadanía, hay menos recursos para la sanidad, para las pensiones, para la educación, para carreteras, para seguridad, etc. Es decir, que se minorarían nuestros derechos. Y eso, la verdad es que está mal, pero que muy mal. Que por parte de los que deben vigilar por la cosa pública se haga eso, si se ha hecho insistimos, es una auténtica guarrada.

Hay una segunda parte, insistimos que en el supuesto de que sea real todo el tema de los sobres, que si no es cierto, no decimos nada. La segunda parte está relacionada con los ingresos, supuestos, del PP.

En los papeles del Sr. Bárcenas, de los que habrá que demostrar su veracidad si lo consideran oportuno los tribunales, aparecen una serie de ingresos de personas físicas y de empresas. Evidentemente, dado el sistema económico que tenemos en nuestro país, cada cual con su dinero puede hacer lo que le venga en gana, siempre claro que no se vulnere la legalidad. Y es ahí precisamente donde queremos llegar: a la posible financiación ilegal de un partido político. Y las consecuencias de estas “donaciones”.

Las donaciones a los partidos políticos están reguladas por la ley. Si se incumple la ley, se está cometiendo un delito. Y el delito hay que castigarlo. Los ciudadanos tenemos derecho, y los tribunales la obligación, de que la ley esté por encima de todo y de todos, sea cual sea la condición del posible delincuente.

Lo contrario, es decir la permisividad de este tipo de conductas, nos reiteramos, si es que se han producido, nos llevaría a consecuencias nefastas como el tráfico de influencias, la prevaricación, la fuga de capitales, etc. Es que hay que tener claro que nadie, en nuestra sociedad, entrega nada gratuitamente; cuando se “regala” algo es porque se espera algún beneficio. Y además algo que es directamente perjudicial para el ciudadano de a pié: el sobrecosto que puede suponer toda aportación empresarial de este tipo.

Las empresas nunca, nunca, minorizan sus beneficios. Si un empresario se ve en la necesidad de aumentar las comisiones, establece un incremento de los costos de producción. Es decir, si hay que aportar al partido X, 60.000 euros, por poner un ejemplo, pues como se ha producido un aumento de los costos, se repercuten dichos costos en los productos y ¡ listos !.

El problema es cuando se hace esto, por ejemplo, por una cadena de supermercados. Si por esa supuesta cadena, se hace una donación de 60.000 euros, dividiría los euros entregados por las ventas que espera realizar, con lo que aumentaría el precio a cada producto. Así nos saldría, y estamos ante un supuesto ficticio que en nada tiene que ver con la realidad, al menos hasta que lo digan los tribunales si es que lo dicen, que el comprador tendría que pagar 1 céntimo más por cada litro de leche, tres céntimos por el kilo de garbanzos y dos céntimos por cada kilo de pescado que compre. ¿Se ve quién es el que hace la donación?.

Pues eso. Para evitar todas estas sospechas, hay una cosa muy clara que el Sr. Rajoy se comprometió en la campaña electoral: Elaborar y aprobar una ley de transparencia. Todavía seguimos esperando, aunque como ya se ha acostumbrado el PP a incumplir total y absolutamente su programa electoral, nos sospechamos que este punto seguirá la misma suerte.

Además hay algo que sospechamos que es el fondo de todo este escándalo de supuestos sobres negros y de financiación ilegal: es posible que haya una guerra por el poder. No sería nada extraño, y seguimos especulando, es decir haciendo política ficción, que se pretendiera, aprovechando el aire que sopla, el desalojo de los actuales inquilinos de la calle Génova, para que esos sillones sean ocupados por otras personas. Si se está desarrollando esta “guerra” no debemos ser los ciudadanos los que apechuguemos con el problema, el problema debe ser asumido por los contendientes, y no por los que tenemos derechos a ser gobernados por los que hemos establecido con nuestros votos. El tiempo será el que diga si estamos en lo cierto o nos equivocamos.

Nino Granadero



viernes, 8 de febrero de 2013

LA INGENUIDAD NO SABE DE LAS MALAS ARTES

Hay días que es mejor, no ya no levantarse, sino no ver, no oír o escuchar, incluso, no andar, ya que con estas carencias, en ese día, se viviría muchísimo mejor que haciendo todo lo contrario. Es verdad que en ocasiones, se desea prolongar la noche hasta que se encuentre con la otra noche para así no darle cuantas al día que está entre ambas, y de esta manera pasar desapercibido “reliado” entre sábanas y mantas, gozando de ese acurruco calentito entre las mismas, y así dejar ocupaciones y pre-ocupaciones para otros momentos, donde afrontarlas, no causarían traumas y se podrían digerir con más soltura.

Uno de esos días, fue ayer. Si. Ayer. Quizás parezca como si fuera una frivolidad o tontería. Pudiera ser. Pudiera. Quizás, pero… es así. Sin más vuelta de hoja que la de un libro acabado de leer hasta sus últimas frases en su última página, donde por más que uno quiera, y quisiera continuar saboreando de su lectura, por ser interesante, incluso, entretenido y divertido, no encuentra más página, porque la narración de su argumento, se ha acabado. Ésa es la sensación. Es más…, bueno, me explico y relato lo de ayer, ¿de acuerdo? Antes… podría hacer una breve historia y dar razones sobre el por qué del estado de desencanto. Voy a ello.

En todos los días de los años de mi vida, he asistido, como vecino pre-ocupado, a dos plenos del Ayuntamiento de Jerez, ciudad de la que formo parte como ciudadano en una de sus pedanías, y si al primero al que asistí, su desarrollo y discurrimiento en los temas tratados, fue de lo más anodino y bochornoso que podía imaginar en el comportamiento de los ediles allí reunidos, no digo nada del segundo, que fue ayer. Lo menos que puedo decir es: esperpéntico. Y de ahí en adelante, todos los adjetivos calificativos que se puedan imaginar en el mismo sentido. Porque… más que una reunión de adultos responsables de la gobernanza de un Pueblo con serios problemas de poner orden en los asuntos de la “casa”, en donde como punto principal a tratar era, lo que pedía la oposición, que se diera marcha atrás en la decisión del equipo de Gobierno en la concesión por 25 años de Aguas de Jerez a una empresa privada, parecía una clase de parvulitos, en donde el que manda, manda y hace preguntas con las respuestas de conformidad afirmativas a las que tienen que asentir los niños forzosamente, porque no pueden hacer otra cosa. El que manda, manda y pregunta, diciendo antes de la misma: “… porque todos estaremos de acuerdo, y si alguien no está de acuerdo, que levante la mano, en ¿Es verdad que…? ¿Verdad que sí?, ¿nadie levanta la mano? ¿Nadie?, pues ¡ea!, ya estamos todos de acuerdo en la primera. Y así, sigue el que manda en su interrogatorio, con la segunda, con la tercera, con la…, hasta llegar la séptima pregunta (que no se si esto tiene algo que ver con las siete plagas de Egipto), que acaba satisfecho porque todos están de acuerdo y nadie ha levantado la mano. ¡Claro!, los niños, que son niños, vaya por delante, son más débiles que el maestro, están cogidos por todas partes,y mientras que se desarrolla la intervención del mismo, ellos callan. Una vez terminado el interrogatorio, ellos dicen no estar de acuerdo y dan sus razones argumentadas, pero… ¡claro!, ¡son niños! Y el otro ¡es el maestro!

Todo lo metafórico real contado, transcurre durante largas horas de la mañana, hasta que cansados de que la noria dé las mismas vueltas para sacar las mismas aguas, termina sin que el maestro suelte a la burra, ¡esos si! dándole el animal a un privado que pasaba por allí para que continúe sacando el mismo agua, dejando solo a los niños ver el espectáculo, sin otra opción que la de conformarse.

Los refranes se componen para reflejar situaciones de verdades populares y este que transcribo, viene a pelo para reflejar lo que de verdad se dice: “Los borrachos y los niños, son los únicos que dicen las verdades”.

Y aquí, en este caso, el maestro no estaba borracho.

La ingenuidad no sabe de las malas artes y quizás, por eso, hay días que es mejor, no ya no levantarse, sino no ver, no oír o escuchar, incluso, no andar, ya que con estas carencias, en ese día, se viviría muchísimo mejor que haciendo todo lo contrario. Es verdad que en ocasiones, se desea prolongar la noche hasta que se encuentre con la otra noche para así no darle cuantas al día que está entre ambas, y de esta manera pasar desapercibido “reliado” entre sábanas y mantas, gozando de ese acurruco calentito entre las mismas, y así dejar ocupaciones y pre-ocupaciones para otros momentos, donde afrontarlas, no causarían traumas y se podrían digerir con más soltura.

Simón Candón 8/02/2013

viernes, 1 de febrero de 2013

ESTO ES GRAVE. MUY GRAVE.

A estas alturas de la película, uno, uno no se asombra de nada, o casi de nada. ¿Y por que digo esto? Tranquilo. Todo tiene su por qué y su explicación, aunque para explicaciones quien las tendría que dar es nuestro ilegitimado Presidente Sr. Rajoy. Él sabe de qué y nosotros también, pero… como es su costumbre, aparecerá tarde y a destiempo. Como siempre. No nos extrañemos que salga diciendo que él no conocía a ese sujeto patriota de los veintidós millones porque nunca, nunca estuvo afiliado a su partido, y por lo tanto, tampoco nunca pudo ser tesorero del mismo. Que son patrañas y acusaciones antipatriotas.

Pues bien, como decía en el párrafo anterior, a estas alturas de la película, uno, uno no se asombra de nada, de nada, o casi de nada. Esta mañana hablando y comentando lo que en estos días nos trae a todos o a casi todos los españoles sobre los 22 milloncillos de nada y los sobres con dinero negro (ellos saben qué color tiene, como los caballitos de colores), resulta que se me han puesto los pelos de punta. Y dirán ustedes, ¡hombre… no será para tanto! Pues si, si que lo es, o por lo menos, a mi me lo parece y así lo he sentido. La conversación discurría por el camino de la decepción sobre la clase política y el cabreo sobre lo que está ocurriendo en este País (precisamente hablando de País, estábamos conversando sobre la noticia que dio el diario del mismo nombre sobre los que han trincado, de trincar, de robar, de llevárselo calentito sin rubor alguno) cuando de golpe y porrazo, mi interlocutor, con cólera subida y con las venas del cuello hinchadas como las de un cantaor de flamenco, me espeta lo que sigue: “aquí, aquí en España, si, aquí, aquí, aquí lo que hace falta es un Franco un par de meses y que entre por los cuatro puntos cardinales (que no con cuatro Cardenales, o si me apuras, con ellos también) y verás como arregla todo esto en un pis-pas y pone a estos canallas en su sitio. Si hombre, si. Ya está bien. Que estamos hartos, cansados, asqueados de tantos mangantes, tunantes, rateros y sinvergüenzas. Que da asco como está nuestra España. Que da asco. Un Franco aquí dos meses. Un Franco aquí dos meses y con dos cojones. Que estos políticos han esquilmado España. Que nos han dejado sin nada. Todo el trabajo y esfuerzo de nuestros padres y de nosotros mismos para tener un patrimonio envidiable, como Renfe, Iberia, Empetrol, Campsa, El Banco Hipotecario, Caja Postal, un Banco de España fuerte y serio, Correos, etc., etc, y resulta que estos cabrones que nos dirigen lo han vendido a sus amiguetes y nos han dejado sin nada de nada, es más, ahora no tenemos ni patrimonio, ni dinero, porque estos innombrables se lo han pulido todo y el dinero, se lo han quedado estos hijos de putas. De verdad, estoy encendido, indignado, cabreado y con ganas de… ¡en fin! Tú me entiendes. ¿no? Es que no puedo más. Es que no puedo. Se me achicharra la sangre. Se me achicharra. Venga recortes, venga recortes y recortes. Y un Viernes y el otro también.Siempre al mismo palo, siempre al mismo palo. No puede ser siempre al mismo. Una mentira tras otra y otra y otra y no paran, y no paran. Esto tiene que tener su límite, vamos, digo yo, ¿no?, o seguimos aguantando a esta gentuza y mancha de ineptos. Si yo lo que he hecho toda mi tupa vida ha sido trabajar, trabajar, trabajar y trabajar para llevar mi casa para adelante, y estos tío, trincar, trincar, trincar y robar sin frenos. ¿Digo un Franco? Diez Franco junto para poner pié en pared. Perdona, pero es como me siento ahora mismo. Con una rabia que no veas. Esto es una dictadura disfrazada de democracia. No nos matan a tiros, pero nos están matando a golpe de dejarnos sin nada, sin trabajo, sin poder llevar a casa un mínimo para sustentarla porque, incluso nos quitan las casas y sin el futuro de nuestros hijos. ¿Qué más? ¿Qué más? Ya lo único que nos falta es que esta banda de bandidos nos suban en camiones y…”

Escalofriante ¿no?

¿Los pelos de puntas? ¡Claro!

Y tuve que interrumpirlo. Estaba encendido. Porque teniendo razón en casi todas las cosas, lo que no era de recibo decir lo de Franco y resucitarlo. Lo peor de todo esto es que este tipo de comentarios sobre quien tiene que venir a salvar de la ruina al País, se repite cada vez más entre la población. Yo lo he escuchado en más de una ocasión y esto es grave. Muy grave. Tan grave como lo que está sucediendo con la casta política, que con sus decisiones, acciones, tropelía y con su todo vale con tal de joder al contrincante para quedarse en el poder, ha llevado a los ciudadanos al descontento, al desencanto, a la desconfianza, incluso, a veces, a la apatía y a decir que todos los políticos son iguales. Hay sus excepciones. Poquitas, pero las hay.

Yo de todas las maneras continuaré en mi utopía y seguiré caminando detrás de ella para alcanzarla, aun a sabiendas de que nunca lo lograré, porque cuanto más ande, más se aleja, pero mi empeño, me ayudará a seguirla durante toda mi vida.

Simón Candón 1/02/2013