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lunes, 11 de noviembre de 2013

MIRARSE EL OMBLIGO


 Nada más vacío e inútil que el ejercicio de mirarse el ombligo. Eso es exactamente lo que hicieron este fin de semana los socialistas: una pérdida de tiempo, de energía y de recursos que, en la época en que estamos y con la que está cayendo, no tiene justificación alguna. Por eso decimos que el fin de semana los socialistas han hecho el mayor ejercicio de egolatría política de los últimos tiempos. Para ese viaje se podían haber ahorrado la pantomima.

El desfile de elefantes blancos fué similar a los partidos de fútbol de las viejas glorias: detalle cara a la galería y poco más. Las viejas glorias no van a resolver los problemas de este país, entre otras cosas porque están comprometidas con el sistema, y sin ganas de cambiar nada. Por eso decimos que la conferencia socialista no es más que un ejercicio de autocomplacencia.

No se ha ofrecido ninguna solución a la situación de la casi moribunda sociedad española. Nuestro sistema social y político está caduco y en fase terminal. No así el sistema financiero, cada vez más boyante y con las arcas repletas a costa de los contribuyentes. No vamos a ejercer de profetas, pero la gran banca, no sólo en España sino en todo el mundo, está preparando el asalto a los ahorros de los distintos sistemas de Seguridad Social. Los depósitos de los sistemas públicos de pensiones son muy apetitosos y supondría el control total y absoluto de las pensiones. Ahí es donde ven el futuro los banqueros.

Vaya por delante que vamos a hacer un alarde de buenos pensadores. A lo mejor hasta lo han hecho con buenas intenciones. Lo que ocurre es que presentar como maestro de ceremonias a Rubalcaba, nos parece una tomadura de pelo. Decir a la opinión pública que el PSOE es distinto al PP es algo que está de más. Se supone que son dos partidos políticos distintos, aunque la práctica política de ambos en los últimos gobiernos, no ha tenido consecuencias muy diferentes para los trabajadores. No olvidemos que fue el señor Rodríguez Zapatero el que comenzó la reforma laboral y abrió la brecha para la salvajada que ha hecho posteriormente el señor Rajoy. Fue el Sr. Zapatero el que dio barra libre a los bancos, pero parece que eso se ha olvidado, o quieren que se olvide por los ciudadanos.

Los recortes iniciados por ZP han seguido, al más puro estilo neoliberal del siglo XIX, con el actual inquilino de la Moncloa. Claro que de un gobierno del PP es lo que se espera: que defienda los intereses del gran capital, porque ni tan siquiera está protegiendo a las empresas: solo mira por los intereses de la gran banca.

La parafernalia de Pérez Rubalcaba dando paseos por el escenario, rodeado de fieles batidores de palmas, no es ni más ni menos que una puesta en escena vacía de contenido. Los reproches de la Presidente andaluza son un ejercicio de cinismo de lo más descarado. ¿Cómo puede la Sra. Diaz, doña Susana, echar en cara al gobierno actual todos los males? Hay que recordarle que ellos, su partido, ha estado gobernando las dos últimas legislaturas. Hay que recordar a Susana Diaz que en Andalucía los recortes en sanidad, educación, bienestar social, asistencia a desvalidos, etc. se han ejecutado, obedeciendo órdenes del Sr. Montoro, sobre la marcha, en tanto que una serie de gastos ni se han tocado: vehículos oficiales, sueldos de cargos públicos, empresas públicas donde “reubicaron” muchos amigos y familiares, etc.

La repetida frasesita de “el PSOE ha vuelto” es un latiguillo que quedaría muy bien en carnaval. Lo que pasa es que los carnavales son en febrero, o sea que todavía quedan tres meses. Por cierto que si el PSOE ha vuelto ¿significa que se había ido?. No sólo es indigno sino de auténtica payasada, de pista de circo. Para que el PSOE vuelva es necesaria una refundación, no un lavado de cara y un maquillaje ligerito.

Es ahora, cuando pitan bastos, cuando se dan cuenta los socialistas que el pueblo existe. Es ahora cuando se ofrecen y se autodescubren como candidatos para asistir a las manifestaciones convocadas por los ciudadanos. ¡Sencillamente patético!. Mire vd. por donde ahora han hecho estos descubrimientos. Lo que parece que les queda por descubrir es que hay miles de personas que están pasando hambre, que están desesperados porque no ven futuro, que son desahuciados por los bancos. Chicos que no pueden matricularse en las universidades porque su familia está parada y deben acudir al mercado de trabajo, al mercado negro que no al legal, para ganar menos del salario mínimo. Los pocos que tienen ocupación laboral en estos momentos están sujetos a contratos de esclavos, algo que un partido socialista no debería consentir.

El cuadro final tampoco tiene desperdicio: el coro de los delegados andaluces cantando el himno andaluz, con el Sr. Griñan y Susana Díaz rodeados de aspirantes a la poltrona, es el colmo de la tomadura de pelo. ¡Y encima desafinaban!

Obscuro, muy obscuro panorama. No hay alternativa. Y en la acera de enfrente, la del PP, los mariano boy’s a lo suyo: machacar a los españoles para que los banqueros estén contentos, así ellos, de camino, siguen dándose la gran vida. ¡A los ciudadanos que les vayan dando!.
Nino Granadero