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jueves, 9 de junio de 2016

LA PASADA

No me gusta utilizar palabras foráneas cuando tenemos, por fortuna, sobrada riqueza léxica en nuestro idioma. Por eso no utilizo el extranjerismo “sorpasso” porque en español es “pasada” o también podemos utilizar la expresión, mucho más gráfica en este caso, “dar una pasada”.

Y eso es lo que le está ocurriendo al PSOE, que le están dando una pasada y no se entera de por dónde. Lo están pasando por el lado del que siempre ha presumido: la izquierda. Y lo está pasando una formación salida de la voluntad ciudadana, de las asambleas del 15M capitalizada, aunque les duela reconocerlo a muchos, por una enorme masa de ciudadanos cabreados y decepcionados. “De aquellos polvos estos lodos” Sr. Sánchez.

Cuando se produce el abandono ideológico, cuando se hace una dejación de principios y se olvida la sociedad a la que se debe una formación política, suceden estas cosas: que la sociedad le dé la espalda a los olvidadizos (¿podríamos decir traidores?). Cuando la estrategia política, tiene por finalidad tan sólo mantenerse en el poder, conservar el sillón y las prebendas añadidas, suelen ocurrir estos daños colaterales.

Ya lo dijimos el año pasado en este mismo foro (ver Bisagra 17.10.2015): el destino a corto plazo del PSOE era convertirse en un partido bisagra, esa era la condena a la que los ciudadanos iban a someter a esa formación política. Y ello por los motivos ya aducidos: abandono de ideología, conservadurismo, dar la espalda a la sociedad, falta de liderazgo, envejecimiento y bloqueo de cambios internos, etc. Han sido muchos errores, y me consta que ha habido voces internas, muchas voces, que alertaron del problema. Pero los que estaban en la poltrona no quisieron bajar a la arena. Por eso Sr. Sánchez y colegas, “de aquellos polvos, estos lodos”.

Coincidimos con el somero análisis que hace José María Triper en su artículo “El PSOE de Alternativa a Palmero”, (Economista 9.06.16). Y coincidimos porque en su momento ya lo dijimos: el PSOE ha perdido la visión de Estado, arrastra crisis de identidad y ha dado de lado a los ciudadanos.

Ahora, Sr. Sánchez, y baronía, deben ustedes asumir las consecuencias; aunque las culpas deben buscarse algunos años atrás cuando comenzaron las imposiciones y los chantajes políticos del Sr. González.

José Campanario